Tras varios meses de paralización de la obra, se confirmó que el Gobierno Regional de Puno y el Consorcio Hospitalario “Manuel Núñez”, se fueron a un arbitraje que defina sus desacuerdos respecto al proyecto.
El procurador público regional Santiago Molina informó que, en la actualidad, se está conformándose el tribunal que defina el arbitraje y, posteriormente, se continuará con el proceso de conciliación.
CONTROVERSIA.
Si bien el procurador no dio detalles de la controversia, con anterioridad, el gerente regional Manuel Quispe sí explicó el problema.
La parte principal de la controversia tiene que ver con el estudio de suelos.El consorcio no está conforme con el realizado en la etapa de elaboración y, en sus primeras excavaciones, encontró resultados distintos a los que tenía en documentos.
De manera simple, explicaron que el terreno tiene rocas a mayor profundidad de las indicadas en el expediente.
Otro de los aspectos que se cuestionaban era el referido a un sistema para el drenaje de la zona y, por las razones explicadas, solicitaban un adicional, es decir más dinero del asignado para la obra.
Otros aspectos que retrasaban la obra eran la implementación de medidas se seguridad para evitar contagios por covid-19 entre los trabajadores de la obra.
RESPONSABILIDADES.
El expediente se realizó durante el periodo de Juan Luque y la gestión de presupuestos, durante el corto paso de Walter Aduviri. De acuerdo a lo vertido por el consejero regional, Vidal Flores Ccopa, la responsabilidad de Agustín Luque está en cambiar a los miembros del comité de licitación y colocar gente que no actuó de manera responsable.
Se debe agregar que, se sospecha que, durante la elaboración del expediente, se recurrió al método del “planchado” pues se usó el estudio de suelos de la obra de construcción del hospital de Essalud.
