A través de su cuenta de Facebook, la compañía se despidió de sus clientes peruanos en un escueto comunicado en el que agradecieron su preferencia, sin otorgar explicación detallada de su salida del mercado peruano.
Elektra, con 24 años de presencia en nuestro país, contaba con un total de 60 locales en territorio patrio, de los cuales la mayoría había cerrado a fines del 2020. Las pocas sucursales que se mantenían abiertas empezaron a liquidar su mercadería.
En noviembre del año pasado, un grupo de inversionistas peruanos adquirió el 100% de las acciones del Grupo Elektra, propiedad del empresario mexicano Ricardo Salinas Pliego. También se vendió la totalidad de las de Banco Azteca Perú, el cual operaba desde el 2008
¿Qué pasará con los créditos de tienda Elektra?
Jorge Carrillo Acosta, profesor de Pacífico Business School, sostuvo que la venta de productos estaba amarrada al financiamiento que otorgaba el Banco Azteca a los clientes, tal como se promocionaba en los catálogos de Tiendas Elektra.
“Todos los créditos que se colocaban tanto de tarjeta como préstamos directos para comprar electrodomésticos, lo sigue administrando Banco Azteca, con una mora bien alta, pero ellos se encargan”, mencionó.
Agregó que los cliente sí o sí tendrán que honrar sus deudas con las mismas ‘reglas de juego’ que se le otorgó el crédito: plazos e intereses
“El que siempre llamaba a los clientes para cobrar la deuda no era el funcionario de Elektra, sino el de Banco Azteca. Por ese lado, los clientes de crédito no van a tener muchos cambios, así sea que la entidad financiera busque otro nombre en el país”, precisó.
Carrillo sostuvo que si llegara a cerrar el banco, ellos venderían esos créditos a otra entidad financiera para que cobren la deuda de los usuarios.
“Eso pasó con Caja Luren cuando quebró porque los créditos deudores lo vendieron a Caja Arequipa y BCP. La deuda no se va a perder”, puntualizó.