“Un día nomás vendemos, ya no es como antes, ahora está más vacío, personalmente me ha chocado total, mi plata se ha acabado en el tiempo de pandemia, no nos han dejado vender, he llorado por primera vez. Me ha afectado en todo, antes había negocio, ahora todo está bajo…», nos cuenta la comerciante Maribel Ccopa, antes de lanzar un largo suspiro.

Ella es una microempresaria que se dedica a la venta de comida en la feria de ganado de Acora, y nos refiere que vender en estos tiempos ya no es rentable, y apenas le alcanza para el sustento semanal de su familia de cinco integrantes.
La feria de ganado de Acora ha sido afectada por la pandemia, y opacada su protagonismo por la feria vecina de El Collao Ilave, que se lleva a potenciales compradores, así lo indicó Sergio Ccamapaza ganadero de la zona.
«Antes de la pandemia, el ganadero bajaba del camión su semodiente a vender y de inmediato llovían las ofertas de los compradores», recuerda.
Antes de la pandemia la venta de ganado en la ciudad de Ilave se realizaba los domingos y en Acora los días sábados, razón por lo cual esta última feria congregaba a gran cantidad de vendedores y compradores de toda la región. Ahora ambas ferias coinciden el día sábado.
Por su parte, Leonor Choque visitante proveniente de Juli nos relata que antes de la pandemia la feria de ganado de Acora era lleno, había más ganado para vender y comprar, ahora la plaza de ganado en el sur de la región se ha partido, y mayoritariamente los compradores se dirigen a la ciudad de Ilave.
«En Acora la feria se desarrolla tan solo una hora, ya no es igual, veo que casi ya no sale ganado», comentó.
Sin embargo, destacó que los toros corpulentos, que lucen galantemente en la feria de Acora son preferidos por los compradores que los llevan a los mercados de Tacna y Arequipa, por su buena carne, debido a su alimentacion con pasto natural, avena y alfalfa.

La feria de ganado de Acora a reúne a productores ganaderos, comerciantes, compradores y visitantes.
Desde muy temprano los ganaderos se levantan para hacer una caminata arreando semodientes hasta el lugar donde transporta su ganado en camión desde diferentes puntos de la región Puno, como Taraco, Ayaviri, Juliaca, Yunguyo e Ilave.
En la feria de ganado de Acora también se comercializa ovinos, porcinos, auquénidos y equinos procedentes del mismo distrito y comunidades aledañas de Chucuito, Platería, Laraqueri, Ilave y Puno.
Mario Huanca, emprendedor ganadero, recuerda que el precio regular de un toro de engorde solía bordear de 6 mil y 7 mil soles, y tras la pandemia, la última vez que vendió un toro fue en marzo a un precio de 5 mil 500 soles.
Huanca con gran nostalgia recuerda que la feria de ganado de Acora comenzaba a las 4 de la mañana y se extendía hasta la una de la tarde.
Tras la confirmación del primer caso en el país de Covid 19, el 15 de marzo del 2020 se suspendieron todas las actividades por la cuarentena decretada por el gobierno central y la feria de ganado de Acora fue cerrada.
La feria se reabrió el 30 de mayo, con un trabajo coordinado de autoridades, personal de la comuna Acoreña, tenientes gobernadores, directivos de barrios, soldados del Ejército y otros que realizaron estricto control de ingreso al 50 % de actividades.
Sergio Ccamapaza al día de hoy indica que el costo de vida ha subido, y esto lo desespera: «ya que para negocio el chancho por ejemplo ya no da, lo que antes se vendía a 400 soles, hoy está a mitad de precio y hasta conviene matarlo y venderlo en chicharrón”.
Asimismo añade que “el aforo de 50% está por gusto (…) está muy vacío la plaza el alcalde debería reclamar que Ilave no nos quite los camiones que solían traer toros de taraco, progreso y otras zonas”.
Mario Huanca, también del centro poblado de Caritamaya, nos cuenta que el engorde de ganado ya no es rentable, su actividad consiste en comprar toros flacos y en 2 o 3 meses regresaba el mismo animal a la plaza.
Cuenta que tras la pandemia el precio ha ido jugando y se ha visto afectado por la adquisición de alimentos con nutrientes para sus toros (compra de soya, harina de pescado, harina de habas, chuño, alfalfa, heno molino y otros), que utiliza para el engorde de su ganado, el cual incremento en su presupuesto (aproximadamente 500 soles).
Así indica que antes solía trabajar más con toros grandes provenientes de Taraco, ya que no los traen, ahora ha optado por el engorde de toros por 6 meses.
Las actividades tras la pandemia duran aproximadamente 2 horas y a las 7 de la mañana ya no queda ganados, posterior a las 8 ya ni un alma queda.
Datos:
Ante el avance de la feria de ganado de Ilave, el alcalde de la municipalidad distrital de Acora, Lucio Istaña, como economista debe escuchar el clamor de los ganaderos y tiene que impulsar el reflote de la feria de ganado de Acora, aplicando estrategias de marketing y mayor inversión.
Que no se repita la desaparición de la feria de ganado de Acora, como ocurrió con la feria dominical (decada de los 80), que por dejadez de las ex autoridades ediles fue trasladada a la ciudad de Ilave, y Acora fue convertida en un pueblo aislado del movimiento económico regional, pero con el esfuerzo de sus pobladores ahora está recuperando ese sitial que antaño tenia en el sur de la región.
Por: Gilder Isis Alave Bravo