Indignante, el funcionario de EsSalud, Jaime Félix Rivera Guevara (68), enfrenta acusaciones de violación y embarazo a una escolar de 15 años en Puno. A pesar de la solicitud de prisión preventiva por parte del Ministerio Público, el Juzgado optó por una orden de comparecencia con restricciones.
Bajo la sombra de la desconfianza, Rivera Guevara, ex jefe de Oficina de Seguro y Prestaciones Económicas de EsSalud, se enfrenta a acusaciones de usar una cuenta falsa para citar a la menor en enero del 2023.
Según la denuncia, la violó en reiteradas veces, hasta embarazarla. El 24 de noviembre, la escolar nuevamente fue citado por el sujeto, esta vez, para llevarla a una clínica privada y someter a un examen de embarazo, cuyo resultado salió positivo.
Tras conocer el resultado, el sujeto habría obligado a tomar una pastilla para abortar, pero ella se rehusó y decidió denunciar ante la policía. El acusado habría señalado que todo fue con su consentimiento.

El Relato Aterrador
La agraviada, que se conoció con el individuo en redes sociales, detalla que fue citada a su habitación en el barrio Laykakota. Según la denuncia, Rivera Guevara la habría dopado para abusar sexualmente y tomar fotografías, repitiendo estos actos hasta dejarla embarazada.
El Inexplicable Fallo Judicial
A pesar de la contundente denuncia y la solicitud de prisión preventiva, el juez del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de Puno Maximo Tacuri declaró infundado la prisión preventiva solicitado por el Ministerio Público, generando consternación. EsSalud de Puno emitió un comunicado repudiando cualquier acto de violencia y retirando la confianza al acusado.
El Grito Desesperado de la Víctima
En medio de este escándalo, la víctima, identificada como G.S de 15 años, rompe el silencio en un testimonio desgarrador. Describe amenazas, abusos y la negativa del sistema judicial a actuar. La situación ha llegado al punto en que teme por su vida y solicita ayuda urgente.
En sus propias palabras, G.S, relata el horror sufrido, desde las amenazas hasta la falta de apoyo. Su llamado desesperado exige intervención inmediata del Ministerio de la Mujer y destaca la urgencia de brindar apoyo a una menor embarazada como consecuencia de una violación.
Llamado a la Acción
El colectivo «Ni Una Menos» de la región Puno expresa indignación y señala al sistema judicial como cómplice. La menor, en estado de gestación, enfrenta un futuro incierto, exigiendo la intervención urgente de las autoridades competentes.
Conclusión
Este escabroso caso revela no solo la gravedad de los hechos, sino también las falencias del sistema judicial. La víctima clama por justicia, mientras la sociedad observa con horror la liberación de un presunto agresor. El impacto de este caso trasciende las fronteras locales, exigiendo una revisión a fondo de los protocolos judiciales y un compromiso real con la protección de las víctimas.