En una reunión informativa multitudinaria celebrada en el Salón de Convenciones de San Román, el alcalde de la Municipalidad Provincial de San Román presentó con detalle la documentación, los trámites y las gestiones realizadas ante el Ministerio de Educación y el PRONIED para garantizar la construcción del Colegio de Alto Rendimiento (COAR) en la ciudad de Juliaca.
La asamblea, que contó con la participación de comerciantes, transportistas, dirigentes y estudiantes, evidenció un respaldo unánime a la decisión del Gobierno Regional de Puno y a la validez del informe técnico del PRONIED, en el cual el terreno de Juliaca obtuvo la calificación más alta.
Ventajas estratégicas del terreno de Juliaca
El terreno propuesto en Juliaca se destaca por su ubicación privilegiada: se ubica en una zona plana con fácil acceso a las principales vías de comunicación y cuenta con la inmediata disponibilidad de servicios básicos como agua potable, energía eléctrica, mercados, transporte y atención hospitalaria. Además, la proximidad al aeropuerto y el hecho de que la mayoría de los beneficiarios del COAR residan en la zona norte de la región refuerzan la necesidad de ubicar la institución en este sector.
“Han pasado ya 11 años sin resultados concretos. Hoy, con el terreno legalmente saneado y todos los servicios básicos garantizados, Juliaca se consolida como la mejor opción. No podemos permitir que intereses centralistas impongan otra decisión. ¡Juliaca se hará respetar!”, afirmó enérgicamente el alcalde.
Movilización ciudadana y respaldo popular
El respaldo popular fue evidente cuando los asistentes protagonizaron una marcha en la Plaza de Armas de Juliaca, exigiendo el respeto al informe técnico del PRONIED y la ratificación por parte del Gobierno Regional de Puno. Este acto de protesta subraya la convicción de la comunidad en que la ubicación del COAR en Juliaca no solo responde a criterios técnicos y legales, sino que también satisface las necesidades y expectativas de la población.
La declaración del alcalde y el apoyo masivo recabado en la marcha refuerzan el compromiso de las autoridades locales con la transparencia y la justicia en la asignación de recursos para el desarrollo educativo, marcando un hito en la lucha contra decisiones centralistas que, según los protagonistas, han entorpecido el progreso regional durante más de una década.