Nada frena el paro indefinido y movilizaciones en la macroregión sur. La multitud le ha perdido el miedo a los policías y militares. La inamovilidad social no funciona.
El paro indefinido en Andahuaylas sigue siendo total. Siguen llegando comuneros de los distritos a Andahuaylas. La población no cae en el juego de policías civiles infiltrados.
En Juliaca, la entrega de los féretros con los restos de los 19 asesinados por la represión policial y militar a sus deudos fue masiva. No hubo ningún incidente con la policía y soldados.
En la ciudad de Puno, pese a la orden de inamovilidad social, hubo una masiva movilización exigiendo el cese de la represión, la renuncia de Dina Boluarte, adelanto de elecciones y una nueva Constitución.
Y en la ciudad de Sandia, miles de campesinos de los distritos de Alto Inambari, San Pedro de Putina Punco, etc., se movilizaron por las calles. Delegaciones de cada distrito autofinanciados han viajado a Juliaca.
En el Cusco, delegaciones de 21 provincias marcharon por la ciudad imperial. La movilización es multitudinaria. Desde hace horas, hay una fuerte represión policial y militar. Hay varios heridos y se especula de un asesinato.
Los manifestantes tratan de llegar al aeropuerto, el escenario de los enfrentamientos.
En la provincia de La Convención, al igual que todas las provincias, el paro es total. El martes 10, viajaron centenares de campesinos y otros sectores sociales al Cusco. Ellos están protagonizando la manifestación en la ciudad imperial.
En Ayacucho, el martes 10, se realizó una movilización en solidaridad con Juliaca y exigiendo la renuncia de Dina Boluarte, adelanto de elecciones y una nueva Constitución.
En Arequipa, en el contexto del paro indefinido, cientos de manifestantes llegados en camiones bloquearon diversos tramos de la Panamericana Sur. La situación es de alta tensión en la Panamericana Norte y la ciudad Blanca.
En San Martín, desde este miércoles 11, ronderos acatan un paro indefinido en rechazo al gobierno de Dina Boluarte y el Congreso.
En suma, en medio del velatorio y duelo por los asesinatos en Juliaca, la insurgencia indígena y comunera en la macroregión sur y otras zonas del país continúa con mayor fuerza. Se están sumando otros sectores sociales.
Lo que ha cambiado es el eje de la represión policial y militar. De Andahuaylas, del 7 al 15 de diciembre; en ese lapso, ocurrió masivas marchas y una feroz represión en Arequipa, llegando a su punto más alto en Ayacucho, el 15 de diciembre, con diez asesinatos.
Ahora es el Cusco, en la que se ha producido (y sigue) duros enfrentamientos entre manifestantes y policías y militares. Producto de estos enfrentamientos hay varios heridos. Ojalá no haya víctimas mortales en la tierra de Túpac Amaru.
La insurgencia indígena, comunera y urbana sigue una tendencia creciente en la macroregión sur y se anuncia movilizaciones de apoyo en Lima, el oriente y norte del país. El objetivo: la renuncia de Dina Boluarte, adelanto de elecciones y referéndum para una Asamblea Constituyente.
Jaime Antezana Rivera